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Por desigual distribución de financiamiento por parte del Estado Universidades de rgiones se trasladan a Santiago.

 

Por desigual distribución de financiamiento por parte del Estado: 

Universidades de las regiones se trasladan a Santiago en busca de recursos para financiarse 

Planteles han abierto sedes en la capital para conseguir más "clientes". Unos han sido exitosos, pero a otros les ha ido mal.

 

 

 

JORGE MOLINA, MATÍAS ROVANO Y CORRESPONSALES

 

La desigual distribución de los recursos para las universidades, por parte del Estado, ha llevado a los planteles de regiones a revertir el proceso de descentralización iniciado en 1981, cuando las sedes de la Universidad de Chile y de la Universidad Técnica del Estado se independizaron de sus "casas matrices".

 

"Hay que salir a buscar a los clientes y el mercado está en Santiago", asegura el rector de la U. de la Frontera (UFRO) y presidente de la Agrupación de Universidades Regionales (AUR), Sergio Bravo.

 

Las cifras son claras, según asegura. Aun cuando la Región Metropolitana concentra el 32% de las vacantes de pregrado, recibe el 46% del Aporte Fiscal Directo (AFD) y el 57% del Aporte Fiscal Indirecto (AFI).

 

Y en concursables, la brecha crece: las "ues" de Santiago concentraron el 70% de los fondos del Fondecyt entre 1990 y 2000.

 

Ante esto, los planteles de Arturo Prat, de Atacama, de Valparaíso, de Talca y de Los Lagos optaron por impartir carreras de pre y posgrado en Santiago, con desiguales resultados.

 

Para el director de la U. Arturo Prat (Unap), sede Santiago, Ángel Cabeza, es un tema práctico. "La Unap se expande por una razón presupuestaria, porque el aporte fiscal es ínfimo. El Estado le dice a la universidad manéjese como pueda, crezca o muera. Actuamos con un régimen de sobrevivencia", asegura.

 

Les fue tan bien que construyen un nuevo edificio de 8.000 m¯ (de $4.000 millones) para acoger a los casi 3 mil alumnos que hoy se reparten en tres sedes distintas. Sin embargo, hay críticas entre los alumnos de su casa central, en Iquique.

 

Para el presidente de la Federación de Estudiantes de la Unap, Matías Ramírez, la expansión ha tenido un alto costo para los estudiantes. "En Calama los alumnos hicieron un paro para pedir baños, y en Santiago, los de pedagogía no podían hacer sus prácticas por falta de acreditación. En Iquique hay clases en que los profesores llegan con maletas, hacen firmar la lista y se van", asegura.

 

En la U. de Los Lagos apelaron al mercado. Por ello, su oferta académica se basa en ese sentido y en competir por la demanda de profesionales. "Sea donde se instale, la universidad tiene que garantizar indicadores de calidad", asegura Óscar Garrido, director académico de la sede Santiago.

 

Pese a ello, Hugo Sánchez, alumno de auditoría, dice que "tenemos desventajas notables frente a otras 'ues'. En infraestructura, Osorno, por ejemplo, es espectacular. Acá faltan áreas verdes, lugares de esparcimiento y zonas para el estudio".

 

En la Universidad de Atacama optaron por la especialización e imparten cursos sólo a ingenieros de ejecución en un local arrendado al Colegio de Profesores hasta el año 2009, cuando evaluarán su continuidad.

 

"Un negocio"

 

Matko Koljatic, experto de la Universidad Católica, es claro en su diagnóstico respecto del arribo de las universidades regionales a Santiago: "Es el mercado más grande de Chile, y esperan tener un retorno de la inversión que realizan. Es un negocio lo que están haciendo", asegura. Y agrega que preocupa también que se abran sedes en ciudades pequeñas "porque ahí es difícil obtener una buena oferta académica".

 

La mala experiencia de la U. de Valparaíso en la capital

Alumnos en paro por "condiciones indignas".

 

La apuesta por la expansión puede fallar, y la U. de Valparaíso es un claro ejemplo. A inicios de esta década, de la mano del ex rector Juan Riquelme, se inició una ambiciosa expansión con la apertura de numerosas sedes dentro de la V Región y Santiago. Sin embargo, la mala gestión derivó en un déficit que en 2007 se estimaba en $2.500 millones y que desembocó en una movilización que terminó con Riquelme fuera.

 

"El proceso de expansión se hizo en la forma más precaria y no planificada, sin ningún plan estratégico, gestión financiera o académica (...), eso ha afectado enormemente a la casa central. No hay laboratorios para algunas carreras, bajó la ayuda de bienestar, pero lo principal es el hacinamiento por falta de infraestructura", asegura uno de los voceros de la federación de estudiantes, Jan Johnson.

 

Reconoce que las universidades van a Santiago a "hacer caja", ante el debilitamiento estatal que en las últimas décadas ha afectado a los planteles regionales y que hoy no representa más del 10% de su presupuesto.

 

La situación en la sede Santiago es crítica. Los alumnos están en paro por "condiciones indignas" para el estudio. Se reparten en salas arrendadas, y a los docentes los denominan "profesores taxi": viajan de Valparaíso, hacen clases y se van. "No tenemos los servicios médicos y dentales que hay gratis en Valparaíso", reclama Rodrigo Soto, de Trabajo Social.

 

fuente:Diario El Mercurio de Santiago.

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